miércoles, febrero 22

En nuestra historia de amor, el viento arrastró la noche a otro lugar...

Como un perro viejo y ciego que choca con los muebles y se escucha un sonido sordo, el perro se redirige y sigue buscando su camino, chocándo. Hasta que memoriza los espacios y no choca más... hasta que le reconfiguran el living y el pobre repite la historia.
Soy como el perro viejo ciego. Que choca con sonido sordo en atracciones a hombres que no valoran mi amor. Tengo casi memorizado el living.. y espero que no cambien de lugar los muebles para no pasar por el engorroso proceso de rememorizar.
Abrazo a mi almohada.. porque es lo único que puedo abrazar.

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